El pasado viernes 6 de Junio se llevó a cabo
Con una asistencia de más de 100 personas se debatió el caso de Romina y Elizabeth y el derecho al aborto libre y gratuito. Así mismo otro eje de discusión fue la necesidad de poner en pie un movimiento de mujeres que luche por nuestros derechos para que las mujeres no sigamos siendo objeto de la violencia a que nos condena este sistema de opresión y explotación.
SOBRE LA CHARLA DEBATE de ROMINA TEJERINA – ELI DIAZ
ResponderEliminarPor Verónica, - Trabajadora de la
Sanidad - Integrante de Pan y Rosas
Los casos de Romina Tejerina y Eli Díaz son para muchas mujeres temas no muy conocidos o muchas veces no tienen muy en claro lo que pasó con estas jóvenes.
La charla-debate, presidida por Leticia Celli y Mariana Salvatore, sirvió para explicar que los casos de violencia hacia las mujeres no son aislados y que somos, justamente las mujeres, quienes debemos tomar las riendas y luchar por nuestros derechos.
Como trabajadora de la sanidad, sé muy bien el tema del aborto y las secuelas que trae para las mujeres pobres que se lo practican. Bien sabido es que cuando una mujer llega a la sala de guardia con una hemorragia ginecológica, lo primero que hace el ginecólogo es asentar la denuncia policial, y luego de esto, recién atienen a la paciente. Estas mujeres, no solo tienen que sufrir maltratos psicológicos y hasta físicos, si no que también tienen que cargar con una denuncia policial que luego será un impedimento para conseguir un trabajo”seguro”
La única salida a todo esto es que las mujeres nos organicemos y luchemos por nuestros derechos, para que no sigan existiendo más casos como el de Romina y Eli. Que las mujeres de todos los sectores, en especial las compañeras de la sanidad, entiendan que todas pertenecemos a una misma clase, la clase trabajadora, y que no podemos seguir confiando en instituciones que nos marginan al hambre y a la miseria… Podríamos comenzar por organizar una comisión de lucha por la libertad incondicional de Romina, llevando conciencia (de la realidad que padecen millones de mujeres) a nuestros lugares de trabajo y, sobre todo, para que se deje de “demonizar” a las mujeres pobres que se realizan abortos. Debemos conformar un gran movimiento de mujeres, independiente del estado y de la iglesia, como es la Agrupación Pan y Rosas. Compañeras, sólo con la lucha y la organización podremos conseguir todo lo que nos propongamos.
Verónica
Trabajadora de la Sanidad
Integrante de Pan y Rosas